El sonido está por todas partes, en cada momento del día. Ya sea por la música que escuchamos, la persona que habla contigo, el motor de tu auto o el viento que sopla a través de las hojas. La audición es uno de los cinco sentidos en los que confía la mayoría de los seres humanos y debe protegerse a toda costa y con una buena comprensión de lo que es el sonido, uno puede ayudar a mitigar el daño causado a su audición. El sonido se puede dividir en dos partes, potencia sonora y presión sonora. Pero la verdadera pregunta es, ¿Cómo se relacionan entre sí para convertirse en el sonido en el que confiamos?
El sonido: Potencia Sonora + Presión Sonora
La potencia sonora (vatios) se define como la velocidad a la que se emite, refleja, transmite o recibe la energía sonora (decibelios), por unidad de tiempo. Considerando que, la presión de sonido se define como la desviación de la presión local de la presión atmosférica ambiental, causada por una onda de sonido. Con base en estas dos definiciones se puede determinar que la potencia del sonido es la causa que genera la onda sonora y la presión sonora es el efecto o lo que escuchamos después de que la onda sonora ha viajado al oído.
La percepción del sonido, o ruido, es relacionado por el nivel de potencia acústica en decibelios (dB), dónde el sufijo «A» de dBA es porque para la medición se utiliza un filtro de ponderación para el oído humano que solo capta frecuencias entre 20 y 20.000 Hz.
Esto se puede resumir en una analogía simple usando una bombilla. Las bombillas utilizan electricidad para generar una fuente de luz, esto significa que la potencia requerida (también expresada en vatios, W) para hacer que la bombilla se encienda es comparable a la potencia del sonido. La intensidad de la luz que se genera (expresada en lúmenes) sería la presión sonora. La presión del sonido es lo que normalmente oiríamos o llamaríamos sonido. Esto es lo que se mide porque ese es el aspecto dañino para nuestros oídos. Si la presión del sonido es lo suficientemente alta y el oído está expuesto a ella el tiempo suficiente, se puede producir un daño permanente que resulte en una pérdida auditiva hasta el punto de una pérdida auditiva completa.
Muchas personas han perdido la audición por completo o en gran parte debido a la exposición a ruidos fuertes. EXAIR diseña y fabrica productos de aire comprimido silenciosos y eficientes para el punto de uso. Estos productos cumplen o superan los estándares de ruido de OSHA en el estándar de OSHA 29 CFR – 1910.95 (a).
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